Dinamarca inició este martes su participación en el Mundial Qatar 2022 con un empate sin goles ante Túnez. Una de las figura del cuadro escandinavo fue el portero Kasper Schmeichel, quien realizó una magnífica atajada al minuto 42 ante el delantero Issam Jebali.
🔒 ¿Por qué Dinamarca 🇩🇰 vs. Túnez 🇹🇳 terminó 0-0 en el primer tiempo?
— DSports (@DSports) November 22, 2022
🧤 ¡Porque Kasper Schmeichel está en el arco!
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Dinamarca y Túnez sellaron este martes el primer 0-0 del Mundial de Catar en el juego inaugural del Grupo D, marcado por la presencia del volante Christian Eriksen un año y medio después de sufrir un paro cardíaco en plena Eurocopa que asustó con desterrarlo del fútbol.
En un juego de muchos choques, disputado en el estadio Education City en Doha, daneses y tunecinos fueron incapaces de vulnerar los arcos de Aymen Dahmen y Kasper Schmeichel, de actuaciones destacadas, y firmaron el primer cotejo sin goles en seis partidos jugados hasta el momento en la Copa del Mundo del país árabe.
Sin la brújula de Eriksen, titular en su tercer Mundial (Sudáfrica-2010 y Rusia-2018) tras el susto ante Finlandia que por nada le hace colgar los botines antes de tiempo, Dinamarca se perdió en la búsqueda de la victoria en la apertura de su sexto Mundial.
El volante del Manchester United, de 30 años, se refundió en medio de la disciplinada defensa tunecina, que en la primera parte estuvo mucho más cerca de festejar, incluso sin pasar tanto tiempo en territorio danés.
El nueve tunecino, Jebali, supo explotar sus conocimientos del fútbol de Dinamarca -juega en el Odense BK- para poner a prueba al experimentado Schmeichel: en la primera, en el minuto 23, lo derrotó con un disparo a ras, pero el línea decretó fuera de juego; y en el 43, el ex Leicester envío al córner con las puntas de sus dedos un intento de bañarlo en un mano a mano.
Schmeichel, de 36 años, ya había contado con suerte, en el 11, cuando Mohamed Drager desenfundó un remate que rozó la escuadra derecha tras haberse desviado en el cuerpo de Andreas Christensen.
Con pocas posibilidades de entrar jugando al área norteafricana, Dinamarca apostó por el juego aéreo (Andreas Cornelius estrelló un cabezazo en el poste en el 71) y los remates lejanos (Dahmen mandó a la esquina un violento zurdazo de Eriksen desde la media luna (70) y un derechazo de Cornelius en el descuento).
Apostando todo por el triunfo, Hjulmand hizo un triple cambio (65) que incluyó la salida del capitán, el zaguero Simon Kjaer.
Los europeos pasaron a asfixiar a sus rivales, que pretendieron sacudirse dándole ingreso a su perla Hannibal Mejbri, mientras que su referente, el mediocampista Wahbi Khazri, vio el juego desde el banco.
Los revulsivos, sin embargo, tuvieron poco peso ofensivo, pero ayudaron a que Qatar fuera testigo del primer cotejo sin goles.